Como ya vimos en el último artículo, las saunas tienen múltiples beneficios; no todas las saunas son iguales y hoy, te vamos a presentar nuestra favorita: la sauna finlandesa.
Para empezar este tipo de sauna tiene lugar en una cabina de madera con temperaturas que oscilan entre los 75º y los 95º, alcanzando una humedad del 15%.
A pesar de lo que muchos creen, poco tienen que ver con las saunas de vapor o a los baños turcos.
Ahora bien, ¿cuáles son los principales beneficios de estas saunas? Cuidan la piel, relajan los músculos y favorecen la pérdida de líquidos.
Quizá sea por todo esto, que hoy en día para los finlandeses las saunas se han convertido en un ritual cultural.
Eso sí, ¡recuerda hidratarte bien tanto por fuera como por dentro después de cada sesión!
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